Por nombrar el panorama en el que estamos para intentar afrontarlo y darle la vuelta

¡Más libros, es la guerra!
4 maig, 2023
Manifestació antifeixista. Tornem a la Bonanova
10 maig, 2023

Por nombrar el panorama en el que estamos para intentar afrontarlo y darle la vuelta

7 maig, 2023
 

 

Crecimiento e impunidad de la extrema derecha. En la calle, en las instituciones con el visto bueno, blanqueamiento o como se quiera llamar de los medios, los cuerpos de seguridad y la justicia.

Por el contrario, aumento de la represión contra la protesta social, multas, identificaciones, violencia, procesos jurídicos. Criminalización y acusaciones de terrorismo o similares contra quienes protesten de forma autónoma y en la calle. Lo mismo para los medios, cuerpos de seguridad y justicia responsables del aumento de la represión y el recorte de las libertades.

Desde las instituciones hay un doble discurso pero en realidad se mantiene y acrecientan las campañas, especialmente para migrantes, mujeres, pobres, finalmente la mayoría. Endurecimiento del código penas, reglamentos y normativas sobre el espacio público. Cada vez más aislados, reprimidos y castigados.

Privatizaciones y externalizaciones de los servicios públicos entendidos como negocio, varia el ritmo y la intensidad según quien gobierne pero no se paran, especialmente en la sanidad, cuidados y educación. Peores servicios, en peores condiciones y aumento imparable de la sanidad, la educación privadas. Grandes fondos y grandes poderosos monopolizan estos mercados.

Necesidades básicas imposibles de cubrir a pesar de tener un salario, especialmente la vivienda. Desde los gobiernos del PSOE con mayoría absoluta se desregularizó y liberalizó el mercado del alquiler. Desde la Ley Boyer, hasta hoy no ha parado y no se ve como frenar el hecho de que cada vez más personas y familias no tienen un lugar donde vivir.

El mercado, gracias al Estado, marca las reglas fundamentales de la vida: el beneficio por encima de cualquier otra consideración como nunca antes había ocurrido. Por más que se aparente lo contrario, la dinámica de destrucción de la vida, del territorio y de los derechos colectivos resulta imparable. Solo se frena por la lucha y resistencia de las comunidades, organizaciones y personas autónomas fuera de la cooptación del estado.

Con más dificultades, menos medios y mas atacadas que nunca. Luchas muy desiguales que crean decepción, desánimo y abandono. Gran parte de la población asume con normalidad las estrategias del sistema de explotación y hace responsable a la gente que lucha de sus malestares.

La representación y la delegación para negociar pequeñas mejoras que justifiquen lo fundamental, es el camino que nos dejan para participar y admitir como lo mejor posible, aquello que nos hace la vida imposible.

Así que a defender la lucha y las resistencias, la organizaciones autónomas, independientes y capaces de anteponer los derechos de tod@s por encima de intereses personales o corporativos. Cualquier lucha por pequeña que sea, si logra que la gente se organice, se responsabilice y avance hay que defenderla con todo.

Las inercias son las contrarias a lo que necesitamos, son las de profesionalizar, adaptarse, confiar y delegar y por más que se quiera imponen sus ritmos, sus necesidades y sus objetivos y ponen los intereses colectivos en segundo plano. La represión, la marginalización y la desesperación intentan demostrar que no hay nada que hacer.

Siempre hay algo que hacer, siempre hay quien no acepta la sumisión y la miseria como forma de vida. Hay que apoyarse, hay que ir poco a poco, defendernos y construir sin atender a las medidas del sistema como único espacio de triunfo. El reconocimiento de los medios, las redes y las instituciones no son ninguna garantía de avance, los son el reconocimiento, el apoyo y el compromiso de la gente afectada.

No queremos el mal menor como máximo de nuestros deseos, queremos acabar con este sistema, queremos construir otras maneras de vivir en las que la solidaridad, el apoyo mutuo y la comunidad estén por encima de la competencia, la ley del más fuerte y la satisfacción por medio del consumo. No nos dejamos la vida para tonterías y reconsideremos lo que haga falta, lo que no funciona y probemos para ir avanzando pues la bestia siempre tiene puntos débiles.

Saludos, ánimos y abrazos para los que lucharon, luchan y lucharán por una vida digna.

Comments are closed.