Como personas implicadas en las luchas del barrio y que hemos seguido de cerca y participado en la medida de nuestras posibilidades en los hechos a que se hace referencia queria hacer varias matizaciones al comunicado hecho público por parte de los vecinos de la calle Roig y de Robadors.
La acción desarrollada en Vistalegre fue hecha de forma inesperada por parte de vecinas del barrio que han participado y participan en las luchas contra los narcopisos y contra la expulsión de vecinas. Se hizo de forma espontánea y sin actuar en nombre de ninguna organización sino como responsabilidad de la gente que la hizo.
Se realizó ante la urgencia del desalojo por orden judicial del local, sabiendo que se iba a volver a ocupar de forma inmediata por la misma gente y que solo la respuesta directa e inmediata lo iba a conseguir.
No se rompió ninguna cerradura ni se violentó ninguna ley, es más se tuvo que recibir la violencia, amenazas greaves por parte de los antiguos ocupantes realquilados. Se llamó a mossos por dos veces e intervinieron de forma inmediata, no presentaron ninguna denuncia, animaron a la persona identificada que estaba en el interior de la vivienda a que presentara denuncia contra los que intentaron entrar y a que volvieran a llamar si se repetía la situación.
Muchos vecinos y vecinas de la calle dieron su apoyo, colaboraron en lo que pudieron y animaron a la gente a seguir con su presencia en el espacio a darle un uso legítimo y hasta ahora completamente legal de la acción.
Entendemos la preocupación por salvar la autonomía y la independencia de un movimiento que sabemos diverso y cada cual es libre de asumir solamente lo que decida pero es importante hacer un esfuerzo por entender las posturas diferentes y saber como se han desarrollado antes que juzgarlas.
El objetivo prioritario de la acción es impedir que lo vuelvan a ocupar los mismos que si que actuaban de forma ilegal e ilegítima, exigir que el uso que se de al espacio sea el de un alquiler social o uso colectivo para las necesidades del barrio y apoyar la lucha frente a los grupos inversores que quieren expulsar a las vecinas para hacer negocio usando todas las artimañanas legales e ilegales para hacerlo.
Entendemos que es muy importante salvar la riqueza del movimiento vecinal que tanto ha costado trabajar y tantos peligros tiene porque no dudamos de la buena voluntad de todos ellos y que solo la generosidad, la transparencia y la responsabilidad de todos podrá conseguir vencer o resistir a enemigos tan grandes.
Animamos a todas las personas y organizaciones de calle a dialogar y poner en común lo que así sea decidido y a respetar las diferencias de cada cual.
No será fácil y si necesario. Saludos y ánimos a la lucha vecinal autónoma y autoorganizada.

COMUNICADO A LA OPINION PUBLICA

Nosotros, los vecinos y vecinas del Eje Vecinal Roig-Picalquers y de la Asociación Illa Robador, ante la opinión publica manifestamos:

A) Desde mediados de junio del afio en curso, nos hemos dado a la tarea de combatir la proliferación del tráfico de drogas desde los llamados narcopisos, cuya existencia ha sido reportada y denunciada en múltiples ocasiones por diversas instancias vecinales del Raval barcelonés, en una lucha común que nos ha mantenido unidos con otras asociaciones y vecindarios de otras calles que sufren ese mismo flagelo social.

B) Esa tarea la hemos desarrollado gracias a una actividad intensa, en la que hemos mantenido nuestra creencia en las instituciones y leyes que nos rigen como sociedad, por lo que hemos creído conveniente respetar las disposiciones emanadas del Distrito de Ciutat Vella, el Ayuntamiento de Barcelona, la Generalitat de Catalufia, las diversas autoridades policiales y judiciales y demás marcos jurídicos vigentes,

C) Cuando se ha producido una intervención judicial y policial en nuestras áreas de influencia vecinal, hemos colaborado en el tapiado de esos narcopisos desalojados, con la finalidad de que esas viviendas no vuelvan a caer en manos de traficantes de estupefacientes o que sean utilizadas para otros fines ilícitos.

D) Aunque con carácter general reconocemos y respetamos que hay otros tipos de sensibilidades y maneras de actuar ante una misma realidad social como la del Raval, en esta ocasión manifestamos nuestro rechazo al uso dudoso y cuestionable de Ias “ocupaciones ciudadanas” como una manera de enfrentar el problema de los narcopisos, la especulación inmobiliaria y otros males que afectan a nuestro querido barrio.

E) Nuestros Eje Vecinal y Asociación aqui representados no apoyaremos ningún tipo de acción que implique “ocupaciones ciudadanas” ni ninguna otra actuación que incumpla la legalidad vigente para transmitir un mensaje pretendidamente reivindicativo, pues el mismo se puede hacer llegar a la sociedad por canales mas efectivos y que rocen menos con situaciones para-legales y que se puedan volver atentatorias contra la convivencia vecinal en su conjunto.

F) Manifestamos ante las demás calles y asociaciones del Raval nuestra disposición de apoyar iniciativas formales y constructivas para estimular y motivar el desarrollo y la convivencia en nuestro barrio, siempre y cuando esas iniciativas sean discutidas con un mínimo de antelación y cuenten con parámetros adecuados de organización, ejecución y medición de resultados.

El Raval, Barcelona, 13 de noviembre de 2017.