Entregadas las declaraciones anuales a hacienda y antes la solicitud de los permisos para Sant Jordi, confirmando como la burocracia y el papeleo nos ocupan cada vez más tiempo para entretenernos y controlarnos y como se normaliza y crece sin que nos demos cuenta ni nos rebelemos contra ello.

Aparece un vidrio de la puerta del local roto en la noche del sábado al domingo, otro más. Quien sabe si habrá sido un borracho, alguien cabreado con el local o el vecino psicótico que ya lo ha hecho alguna vez más cuando le da el brote y no sabe contra quien golpear. El caso es que otra vez el vecino solidario nos cambiará el cristal a cambio de algún material. Uno de nuestros seguros de apoyo mutuo.

Nos invitan desde Vallecas para un acto sobre gentrificación, narcopisos y luchas en los barrios por medio de los compañeros de la revista Todo por Hacer, tras la entrevista que nos hicieron en Barrio Canino, les pasamos el contacto a Acció Raval e irán para poner en común las luchas de Vallecas y el Raval.

Otra vez en la tienda la discusión sobre si poner o no el pago por tarjeta, cada vez más gente lo pregunta y parece que será inevitable, aunque duela.

Las luchas en el barrio, en la ciudad y en el mundo siguen. Acto de las madres de Lancaster tras conseguir parte de su objetivo y ser realojadas, vermút en correu vell, bloque ocupado en el Gòtic, mañana y semana de desahucios. Siguen los locales reocupados a los narcos y grandes propietarios, sigue la impotencia para evitar que expulsen vecinas del barrio con todo lujo de violencia para especular, aún así se ganan pequeñas victorias frente a los grandes poderes, los que mandan y destrozan vidas y territorios…

Y seguimos sin poder estructurar unos mínimos que permitan ponernos en común para hacer frente de mejor manera y con más fuerza a todo lo que se nos viene encima. Cada cual desde su trinchera, que son muchas, a su manera y con mucho esfuerzo, pelea. En esas trincheras contradictorias vamos construyendo esos mundos nuevos.

Felices de como fue el concierto que ha cerrado el 30 aniversario del lokal. Pocos en el dia y mucha gente colaborando de forma puntual, hace posible mantener todas las cosas que hacemos. Seguros de ser útiles pero sabiendo de nuestras limitaciones e intentando hacer nuestro papel lo mejor posible. Cansados pero vivos.