Reunidos en asamblea el viernes 22 a las 12h del mediodía hemos decidido ponernos en común y movilizarnos para impedir que la nueva propiedad nos eche de nuestras casas con total impunidad. Para conseguirlo nos ponemos en alerta y pedimos una reunión con la concejala del barrio para exponerle nuestra situación y que se movilice en la defensa de nuestros derechos frente a los nuevos propietarios que quieren especular con las viviendas a costa de expulsarnos.

En dos años la finca ha cambiado de propietarios así como de administradores. Los últimos, la sociedad MG Cera 1 SL, son los que ya no están renovando los contratos caducados y a las personas con contratos indefinidos les están ofreciendo verbalmente dinero para que se vayan así como indicando las molestias que tendrán por las reformas que se harán en la finca. Ya terminaron la construcción de un ascensor que han cerrado con llave para impedir su uso habiendo personas mayores y con discapacidades, las tuberías del agua están en el hueco del ascensor por lo que si hay una avería tienen que venir los bomberos para poder acceder, la llave del terrado no está accesible para los vecinos pues la cambió la propiedad, hay tres pisos vacíos y cerrados sin que se hayan puesto en alquiler hace más de un año. De la misma manera no se realiza con regularidad la limpieza de la escalera a pesar de que se ha cobrado siempre el servicio. Todo ello demuestra la falta de voluntad de diálogo y de responsabilidad para cubrir sus obligaciones por parte de la propiedad.

Todos estos hechos demuestran la voluntad de dejar que se degrade el edificio y molestar para que la gente se vaya, sea por miedo o por imposibilidad de tener unas condiciones dignas.

Somos personas, algunas de las cuales llevamos muchos años viviendo en el barrio, algunas han nacido en el edificio, personas que no podemos pagar alquileres altos, personas con familia que estudia y trabaja en el Raval y es por eso que no estamos dispuestas a marcharnos y vamos a defender nuestro derecho a una vivienda y una vida digna conforme a nuestras posibilidades.

Por todo ello pedimos una reunión con Gala Pin, regidora de Ciutat Vella para exponerle nuestra situación y que reaccione para defender nuestros derechos como vecinos y vecinas del Raval.

Raval, finales de septiembre de 2017