El sábado 26 de marzo, nuestro compañero S. fue alcanzado en la cabeza por una granada explosiva durante la manifestación contra los embalses. A pesar de su estado crítico, la prefectura impidió intencionadamente que los servicios de urgencias intervinieran en primer lugar y que le trasladaran a una unidad de cuidados adecuada en segundo lugar. Actualmente se encuentra en reanimación neuroquirúrgica. Su pronóstico vital sigue estando comprometido.
El estallido de violencia represiva que sufrieron los manifestantes se saldó con centenares de heridos, varios de ellos con lesiones físicas graves, tal y como recogen los diversos informes disponibles. Los 30.000 manifestantes habían acudido con el objetivo de bloquear la construcción del megaembalse de Sainte-Soline, un proyecto que pretende monopolizar la gestión del agua en manos de una minoría que se beneficia de un sistema capitalista que no tiene nada más que defender salvo la muerte. La violencia del brazo armado del Estado democrático es la expresión más clara de esto.
En la etapa actual abierta por el movimiento contra la reforma de las pensiones, la policía mutila e intenta asesinar para impedir el levantamiento, y defender a la burguesía y su mundo. Pero nada debilitará nuestra determinación de poner fin a su dominio. El martes 28 de marzo y los días siguientes, reforcemos las huelgas y los bloqueos. Salgamos a la calle, por S. y por todos los heridos y encarcelados de nuestros movimientos.
Viva la revolución
Camaradas de S.
PS: Si tienes alguna información sobre las circunstancias en las que hirieron a S., ponte en contacto con nosotros en: s.informations@proton.me
Deseamos que este comunicado tenga la mayor difusión posible.